Nos dijeron que cuando se va de visita a una casa nueva se regala pan y sal. Sí, así como lo leéis.
No se sabe con exactitud cuándo se comenzaron a regalar estos productos, pero se presupone que se lleva haciendo desde hace unos cuantos siglos.
El pan simboliza el deseo de que en esa casa siempre haya algo para comer, que sea una familia afortunada y nunca les falte de nada. Y se dice que no es un pan cualquiera, sino “el pan de cada día”.
La sal es el símbolo de la prosperidad económica. Actualmente una caja de sal no vale mucho, al menos en Alemania, pero antaño era un producto de lujo. Por eso se regalaba para desear que en esa casa nunca faltase el dinero.
Pero, esto no se regala así tal cual. No vas al supermercado y compras un panecillo y un paquete de sal, sino que se entrega en paquetes bonitos, bien envueltos y con una presentación impecable.
Estuvimos buscando en los supermercados, pero como ya nos imaginábamos, allí no lo encontramos. Así que acudimos a Amazon, allí se pueden encontrar millones de paquetes de diferentes tamaños y precios. Luego caímos en que quizás en las tiendas estas “graciosas” donde venden de todo como “Nanu Nana” podría haber.
Pero mucha gente suele hacer el pan ellos mismos y envolverlo en paquetes bonitos. Seguro que eso trae incluso más suerte aún.
Después de conocer esta tradición me di cuenta de que ya lo había visto. En algunas de las Einweihungsparty a las que hemos ido vimos unos paquetitos muy monos, imaginamos que serían regalos, por lo que no preguntamos qué eran, pero ahora que lo pienso me doy cuenta de que eran el pan y la sal.
¿Conocíais esta tradición alemana? ¿La habéis vivido alguna vez? ¿Os animaríais a hacerlo?
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Vivimos en un país diferente al nuestro, y eso en algunas ocasiones implica también una nueva cultura con tradiciones que al principio nos pueden resultar extrañas. Pero no hay nada como saber de que se tratan para poder entender. ¿Te vienes a descubrirlas con nosotros?
¡Un saludo!
Me encantan tus entradas! Mis tatarabuelos llegaron a Argentina en 1888, y hasta mi infancia mantuvieron sus hijos y nietos tradiciones. Gracias por aclararme dudas acerca de ellas!!!!
ResponderEliminarBuenas, morena. Me alegro de que las entradas del blog te gusten. Si conoces alguna tradición que no esté publicada y tienes dudas de ella, dímelo, puedo investigar y hacer un artículo de eso.
Eliminar¡Un saludo!
¡Qué curioso! Una pregunta en relación a lo que no echarías de menos: si las noches son tan largas en invierno, en verano serán cortas ¿no?
ResponderEliminar¡Buenas, C! En verano son muy cortas. Amanece sobre las 5 de la madrugada y anochece sobre las 10. No llegamos a tener sol de medianoche, pero casi.
Eliminar¡Un saludo!
No tenía ni idea de esta tradición. Un abrazo desde Berlín :)
ResponderEliminar¡Buenas, Pepa! Yo me enteré hace poco y ya llevo viviendo más de cinco años en Alemania, siempre habrá algo nuevo por descubrir.
EliminarUn saludo.