Regalos indeseados

Hay algunas veces en las que la expresión "menos da una piedra" resulta, por lo menos, irrisoria. Y caballo regalado no le mires el diente, puede irse a tomar viento fresco, que en esta época del año podrá encontrarlo con facilidad.

Porque los regalos de Navidad no hay que hacerlos por compromiso, ni coger lo primero que veas en tu armario, allí al fondo, donde se van quedando las cosas que dejaste de utilizar hará milenios.

- Y bueno, que te han regalado los Reyes Magos?

- Los Reyes Magos?

- Ups! perdona, es la costumbre, no me acordaba de Jesús Nieve. Déjame reformular la pregunta. Que te ha traído Papa Noel?

- Quieres escuchar algo gracioso?

- Eeee... si, claro, pero yo había preguntado primero...

- Si... pero tiene relación con los regalos y mi compañera de piso.

- Tu loca Mitbewohnerin vuelve a atacar?? Esto promete, que ha hecho esta vez?

- Te acuerdas que te dije que iba a pasar la Navidad con unos amigos en Freiburg?

- Si, allí en el culo del mundo.

- No está en el culo del mundo!!

- Bueno, eso es discutible.

- Está en el centro de Europa!

- Ya, y cuanto tiempo tardaste en llegar desde aquí, que también estamos en el centro de Europa?

- 6 horas...

- Pues eso, pero bueno, que nos vamos del tema, cuenta, cuenta.

- El tren salía a eso de las 9 de la mañana y a las 7 todavía no tenía la maleta hecha.

- No me extraña, siempre lo dejas todo para el último momento.

- Shhh!! calla! deja de interrumpirme.

- Vale, perdooooonaa.

- Pues eso, que me quedaban dos horas para salir, estaba haciendo la maleta cuando de pronto aparece mi compañera y me dice que no tenemos papel higiénico, que vaya a comprarlo. Le dije que si me daba tiempo lo compraba.

- A las 7 de la mañana me da que vas a comprar poco.

- Si, de hecho no me dio tiempo, así que la llamé, le dije que lo comprara ella y que luego le daba el dinero.

- Te tocaba a ti comprarlo esta vez, no?

- Si, pero, sabes que me dijo?

- No... pero no sé si quiero saberlo.

- Me hizo una lista de todo lo que faltaba, algunas cosas ni siquiera las uso y otras las compré la última vez yo. Me preguntó que si lo compraba todo.

- Le dirías que no, verdad?

- Como le voy a decir eso? no, le dije que si, y a la vuelta me encontré con el ticket de la compra delante de mi puerta. Pero no solo estaba eso, había una sorpresa, un regalo de Navidad.

- En serio, te ha hecho un regalo?

- Si... bueno, un regalo es, pero preferiría que no lo hubiera hecho.

- Y eso? que te ha regalado?

-Una toalla.

- El que? una toalla?

- Si...

- Quien regala toallas por Navidad?

- Mi compañera de piso. Pero eso no es lo mejor. No es una toalla cualquiera, porque no puedo secarme con ella.

- Por qué no? es impermeable?

- No, es ridículamente pequeña, no vale ni para secarse las manos. Aunque ni lo voy a intentar, es súper áspera.

- Es de esas toallas que los alemanes adoran? son toallas petrificadas con tacto lija. Tras arrancarte la piel te dejan el cutis tan suave como el culito de un bebé.

- Además de que es enana y ultra áspera, es viejísima, yo diría que es prehistórica.

- Te ha regalado algo usado?

- Pues no se, pero no se la ve nueva, además, huele raro...

- Y como es? tiene dibujos o algo?

- No, pone "Princess".

- Si? eso lo aclara todo.

- De verdad?

- Si. Tienes razón, la toalla no es nueva, es de la época en la que todavía había princesas en Alemania.

- Eso fue hace muchos años... Tienes toda la razón, por eso huele así...

- Y que has hecho con ella?

- Se la he dejado en su montón de toallas.

- En serio!!???

- Si, pero no ha servido de nada, esta mañana la encontré colgada encima de mi toalla... y ahora ya no se si usarla, seguro que ha quedado infectada...

- Pobre toalla... recemos un Padre Nuestro por ella.

- Un que??

- Nada... olvídalo...

Un saludo!!